Aprendiendo sobre huertas - 2 - Asociación de cultivos para huertos casero en la zona de Monteverde.
Asociación de cultivos para huertos casero en la zona de Monteverde.
Por Gerardo Calderón Pereira.
En un huerto ninguna planta existe de forma independiente, se dan múltiples relaciones entre estas y el entorno que las rodea (insectos, hongo, animales, minerales, otras plantas, etc) y estas relaciones pueden perjudicar o favorecer a cada planta como individuo, por ejemplo, la hierba buena extiende sus raíces por toda el área que le sea posible colonizar y esto afecta a otros cultivos al competir con ella por espacio en el suelo y por nutrientes. Por otro lado, son bien conocidas las ventajas de asociar maíz con vainica y/o frijoles ya que el primero le sirve de estructura al frijol mientras que este fija nitrógeno en el suelo que captura de la atmosfera gracias a la asociación con bacterias Rhizobium.
En el huerto podemos aprovechar estas relaciones para asociar cultivos, esto nos permitirá desde aprovechar mejor los espacios hasta disminuir el uso de abonos y el ataque de “plagas”.
Tipos de asociación.
Salud: Algunas plantas ejercen controles muy específicos sobre ciertos organismos mientras que otras se ven afectadas por esos mismos organismos, un ejemplo de esto es la relación entre la planta Flor de muerto y los nematodos, un tipo de “gusano” muy pequeño y que está muy presente en los suelos de Monteverde y afecta las raíces de las plantas como el tomate, la raíz de la Flor de muerto libera compuestos que ayudan a eliminar los daños causados por nematodos hasta en un 90% por lo que resulta muy útil plantar Flor de muerto al lado de nuestras plantas de tomate y otros cultivos sensibles a esta plaga. También sembrar plantas con olores fuertes o sabores amargos permite alejar insectos de otros cultivos más sensibles, por ejemplo, podemos plantar ruda cerca de las plantas de repollo, esto nos ayudara a evitar que insectos como gusanos y grillos ataquen el repollo.
Nutrición: Existen plantas que demandan mucha cantidad de nutrientes como las hortalizas de hojas y frutos (tomate, acelga, chile dulce) mientras que otros son menos exigentes en nutrición o extraen nutrientes distintos. Incluso plantas como el frijol, la vainica y en general casi todas las de esta familia aportan nitrógeno al suelo. Rotar los cultivos entre plantas exigentes, poco exigentes y plantas que aportan nitrógeno nos permite mantener la nutrición del suelo balanceada y es complementario a la aplicación de abonos.
Complementariedad física: Como vimos en el caso del maíz y el frijol, donde este último trepa sobre la estructura del maíz, otra forma de asociar cultivos es por medio del beneficio físico que le pueda ofrecer uno al otro. También en casos de cultivos con crecimiento vertical pueden asociarse con algunos cultivos de crecimiento horizontal que toleren un poco de sombre. Por ejemplo, podemos sembrar plantas de tomate entre las lechugas, cuando el tomate este desarrollado la habremos cosechado las lechugas y no existirá competencia por luz, además podríamos también incluir algunas plantas de culantro bajo el tomate ya que estas toleran cierta cantidad de sobra, de este modo tendremos 3 cultivos distintos donde de otro modo solamente se hubiera obtenido el tomate.